
Un buen diseño gráfico en el packaging puede ser un factor decisivo en su venta.
Destaque el producto:
El diseño debe llamar la atención del consumidor en el lineal y hacer que el producto se vea atractivo y diferenciado.
Sea coherente:
El diseño gráfico debe ser coherente con la imagen de marca y los valores que representa.


Comunique de forma clara:
El diseño gráfico debe ser claro y fácil de leer, y debe incluir información relevante sobre el producto, como su composición, usos, beneficripción, etc.
Refleje la calidad:
Un diseño gráfico atractivo y de calidad puede transmitir una imagen de calidad del producto.
Sea innovador:
El diseño gráfico debe ser innovador y original, para llamar la atención de los consumidores y diferenciarse de la competencia.
Refleje la personalidad:
El diseño gráfico debe reflejar la personalidad y los valores de la marca, para conectar con los consumidores.


Sea fácil de identificar: El diseño gráfico debe ser fácil de identificar y recordar, para que los consumidores lo reconozcan en el futuro.
Sea funcional:
El diseño gráfico debe ser funcional y práctico, para que el producto sea fácil de transportar y almacenar.
Refleje la tendencia: El diseño gráfico debe ser actual y reflejar las tendencias actuales, para conectar con los consumidores y estar a la vanguardia.
Sea eficaz en diferentes medios: El diseño gráfico debe ser eficaz en diferentes medios, como en el lineal, en la web, en las redes sociales, etc.

En conclusión, un buen diseño gráfico en el packaging puede ser un factor clave para aumentar la venta de un producto. Al seguir estos consejos, es posible lograr un packaging atractivo y efectivo, que atraiga la atención de los consumidores y los anime a comprar el producto.
Si te gustó este artículo te recomendamos continuar con éste otro: El packaging y el aumento de ventas ¿Cómo se relacionan?